miércoles, 27 de junio de 2012

La flor del lado de allá. Roger Mello. Global Editora.



El anta (para aquellos que no lo conocen, un anta es uno de los más grandes mamíferos americanos, llega  a pesar 250 kilos y medir más de dos metros) está en una pequeña isla en el medio del mar. Enfrente, en otra isla, hay una flor. El anta quiere la flor, la ansía, la desea. Pero atravesar el mar no es cosa fácil. Los propios temores, los comedidos que quieren ayudar y empeoran las cosas; los obstáculos se suman, las cosas no son lo que parecen en la superficie. Para colmo, la isla se mueve, se va y el anta queda triste y ¿solo?
Roger Mello nos regala esta pequeña fábula silenciosa. Las ilustraciones están a la altura del desafío. Sencillas y con mucho blanco, como para no distraer de lo importante, son bellas y definidas. La enorme expresividad del anta nos transmite sus sensaciones y emociones. El recurso de alternar dobles páginas de color y en grises, nos adentra aun más en el íntimo dilema del anta. Sin necesidad de moraleja, el libro nos deja esa sensación ¿Cuánto tiempo habremos pasado deseando lo que no tenemos mientras a nuestras espaldas pasan cosas maravillosas?

Roger Mello nació en Brasilia en 1965 y reside actualmente en Rio de Janeiro, es un ilustrador que ya se ha ganado un lugar destacado en la LIJ de Brasil. Su fama ha trascendido las fronteras de su país. Ha sido finalista del premio Hans Christian Andersen de IBBY en 2010 y 2012. Algunos de sus libros son Salvaje de Global Editora (reseñado en este blog con el título Cazadores cazados), O gato Viriato, Maria Teresa y muchos más. 

lunes, 25 de junio de 2012

El Caso Lorenzo | Isabelle Carrier


Una lectura de El cazo de Lorenzo escrito e ilustrado por Isabelle Carrier (Ed.Juventud).

Por Coni Salgado*.





el cazo de lorenzo

Si hablamos metafóricamente, podríamos decir que, en general, todos cargamos con algo. Utilizamos “mochila”, “problema”, “pasado” o “karma” para enumerar esas cosas que se relacionan con situaciones complejas o defectos que acarreamos a nuestro paso. Muchas veces se trata de dificultades; en ocasiones se relacionan con cuentas pendientes o vínculos difíciles e incompletos. Alguna vez se refieren a una discapacidad o a algo de difícil resolución que nos marca o determina nuestro desarrollo o actitud frente al mundo. No somos perfectos, y lo que llevamos con nosotros, es lo que hay: lo que somos.
Algunos niños no pueden superar la etapa en la que la oscuridad de la noche les impide llegar al baño, lo que da como resultado hacerse pis en la cama. Otros no logran hacer bien los ejercicios de matemática. Una nena se siente sola en el colegio y no logra hacer amigas. Juan es malo jugando al fútbol. Tomás no puede superar los celos hacia su hermanito recién nacido. María ha nacido con una capacidad diferente. Los ejemplos podrían repetirse en el mundo adulto. Cuentas pendientes, mochilas que se cargan llevando en su interior un conflicto, tristeza o incapacidad a mejorar o resolver a través del tiempo.

       un día


Una solución podría ser afrontar el problema. Aceptar la dificultad, tal vez sea una forma inteligente de adaptación. Es lo que hay: una verdad que, lejos de conformista, es madura y puede tomarse como punto de partida hacia el cambio.
En el libro El cazo de Lorenzo, el protagonista, Lorenzo, tiene un cazo: una pequeña cacerola que arrastra de un hilo y que lo acompaña a donde quiera que vaya. Un día se le cae encima y Lorenzo ya no vuelve a ser del todo como los demás. A partir de su cazo, Lorenzo comienza a resaltar una característica única y diferente. El cazo podría  relacionarse con una dificultad, una falencia o discapacidad, y, sin embargo, es algo que hace que Lorenzo sea quién es. Le permite tener sensibilidad, sentido artístico, gusto por la música y un montón de cualidades más.

No todas la personas pueden ver el cazo que arrastra Lorenzo. Algunas lo ven raro o inquietante. ¿Qué genera en los demás aquella característica que nos vuelve diferentes? Si aquello que arrastramos nos complica… ¿vale la pena llevar la carga? Sucede que en ocasiones no hay otra opción. Cuántas veces nos preguntamos por qué cuesta lograr aquello que a otros les resulta fácil adquirir. No me refiero a cosas materiales, sino a simples logros personales. Lorenzo grita, se enoja, dice palabrotas. Hay días en que su cazo lo desconcierta, quisiera quitárselo de encima pero es imposible. Siempre está ahí.
Algunas personas logran ver a Lorenzo más allá de su cazo. Lo ayudan a superar su existencia convirtiendo aquello que arrastra en posibilidad.

Las ilustraciones del libro hablan desde la sencillez y la claridad. Se trata de personajes caricaturizados con interesantes intervenciones más allá del texto. La edición del libro es minimalista y atractiva. Las situaciones en la vida de Lorenzo son variadas en conflictos y resoluciones.
Si bien el libro remite a alguien con una dificultad, una capacidad diferente o un vacío que le significa un esfuerzo mayor para desarrollar la vida, todos somos en cierta forma el protagonista del cuento. ¿Quién no arrastra una carencia, un deseo, una dificultad  o un obstáculo a superar?
El libro álbum intenta dejar una enseñanza, pero, más allá de eso, es agradable el recorrido por la diversidad de estados con la que Lorenzo se afianza a su obstáculo expresando la autenticidad de quién logra enriquecerse o crecer aceptando la vida tal cual es.

ISABELLE CARRIER es francesa y nació en 1964 en Voiron (Isère, en los Alpes). Estudió en la escuela superior de Arte de Estrasburgo (Arts Décoratifs) antes de dedicarse a escribir e ilustrar libros para niños. Cuando le faltan ideas para crear un álbum, se inspira en las de Jérôme Ruillier, el padre de sus dos hijas, también autor e ilustrador, y entonces hacen libros juntos. Otro libro de Isabelle Carrier publicado por Editorial juventud es Detrás del muro.

*Mil gracias a Coni, por dejarnos compartir tan hermosa reseña. 
Fuente: Eterna Cadencia



jueves, 21 de junio de 2012

Entrevista a Bartolomeu Campos de Queirós



Una entrevista realizada en el 2010 al galardonado escritor Bartolomeu Campos de Queirós, quien falleció en enero de este año.

En un homenahe a uno de los más grandes exponentes de la Literatura Brasileña. Continente Lij, traduce para ustedes esta entrevista realizada por Ecofuturo*Donde el autor, cuenta por qué sus más de 40 libros publicados se encuentran entrelazadas la naturaleza, la literatura y la educación.


Bartolomeu Campos de Queirós nació en la ciudad de Papagaio, en el interior del estado brasileño de Minas Gerais. Peregrino de cuerpo y más aún de alma, viajó por todo el mundo y ahora vive en Belo Horizonte. O, mejor dicho, él habita en Belo Horizonte, porque vive volando lejos de todo lo que pueda ser contenido, limitado, etiquetado. –quizás porque las paredes de la casa de su abuelo fueron su primer cuaderno. Enfrentar los límites del papel puede haber sido difícil, pero dio como resultado un escritor premiado*,  que sabe envolver como un regalo la más hermosas, sutiles e indescriptibles sensaciones de lo que es ser humano; con la paciencia de los que aman la musicalidad de las palabras, esa que no se puede buscar, que sólo puede ser encontrada por gente sabia y única como Bartolomeu. 
Ecofuturo- ¿En su opinión, dónde y cuándo comienza el aprendizaje de una cultura sustentable? ¿Cómo y por qué la literatura puede contribuir a este aprendizaje?
Bartolomeu - El aprendizaje comienza desde el primer momento de la vida. Todos somos seres en relación y dependemos del mundo para vivir. Instintivamente buscamos nuestra sustentabilidad en la medida que ansiamos la vida. Por eso, todo lo que nos garantiza la supervivencia merece nuestro respeto y protección. Debemos ser sensibles para participar en esta poesía que circula entre los elementos que la naturaleza nos da y las transformaciones que realizan los seres humanos. Vivir es aprender a vivir con los misterios. Entender que muchas cosas no están al alcance del conocimiento humano  nos vuelve cuidadosos de no invadir lo desconocido. La sustentabilidad está relacionada con el valor que damos a la existencia. La literatura, al no negar la fantasía, por nacer de la necesidad de preguntar al lector acerca de las cuestiones que afectan su vida, lo hace más atento y refinado ante el mundo. La literatura nos abre a otras preguntas. Debemos comprender su importancia para la construcción de un paso más digno a través del mundo y la preservación de este mundo.

Ecofuturo
- ¿Cómo puede llevar la lectura a docentes y estudiantes a tomar conciencia de su potencial creativo y transformador?
Bartolomeu - La literatura contribuye a que docentes y estudiantes tomen en cuenta la importancia de la fantasía en el desarrollo del universo. En la medida en que reconocemos que toda la realidad es una fantasía que ganó cuerpo, que antes habitó en la fantasía de alguien que es comprendemos su importancia. La literatura establece un diálogo con la fantasía del lector. De este diálogo profundo, ya que la fantasía es lo que hay de más íntimo en nosotros, está claro que un nuevo mundo surgirá. Es preciso entender que la escuela no puede ser sólo una entidad consumidora. Debe ser, paralelamente un espacio de investigación. La fantasía nos garantiza esto. E investigar motivado por el arte es ir en dirección del afecto, de la belleza.

Ecofuturo
- La cuestión de la sustentabilidad se confirma día a día como uno de los pilares de la educación del futuro, pero ¿hasta qué punto un desarrollo sostenible está en manos de la educación?
Bartolomeu - La escuela no puede ser responsable de todo, ni es su función. Creo que su trabajo es movilizar al estudiante a elegir su destino a través del conocimiento y la reflexión. El desarrollo sostenible, para mí, es cómo la ética. Son comportamientos para ser experimentados, practicados, ejercidos, por toda la sociedad, pero la escuela, al buscar la formación crítica del alumno, tiene gran participación en este sentido.

Ecofuturo
– ¿Qué es lo que la familia, las escuelas y los educadores pueden hacer para que los niños aprendan a seleccionar lo que es verdaderamente sustentable en sus vidas?
Bartolomeu – Tanto la familia y la escuela, como toda la sociedad, debe vivir en armonía con su entorno, haciendo todo lo posible para aprender lo que cada elemento, cada objeto tiene para enseñarnos. "Leer el mundo" es la alfabetización más necesaria y compleja, es estar atento, todo el tiempo, delante de este gran libro sin texto que es el mundo y sus enigmas.

Ecofuturo
- Los libros que escribe reflejan un estado de ánimo, un momento determinado de su vida? ¿Cómo funciona la elección del tema que abordará?
Bartolomeu – Escribir es buscar socios para descifrar el intensidad de los misterios. La escritura es "no saber" y recurrir al lector para que nos ayude a descifrar el misterio que  abre el escritor. Cada libro es un momento, es una pregunta, es la búsqueda de una conversación. Elegir un tema es darle cuerpo a lo que sofoca, es buscar razón para la fantasía, es darle forma al imaginario. Escribir, siempre digo, es abrir la puerta sabiendo que el resto del paisaje está en el corazón del lector. Y más: escribir es tomar posesión de los límites.

Ecofuturo
- Vemos en su obra una fuerte presencia de los animales. ¿Cuáles serían los libros que Usted citaría como más representativos de esa influencia? ¿Puede atribuirse esa relación a vivencias de su infancia?
Bartolomeu - Me gustan los animales. Ellos me intrigan, me cuestionan por su trabajo, por sus instintos. Tomarlos como objetos de reflexión es sumergirse en grandes secretos. Me encantan los medios con que todos los seres vivos luchan para sostenerse a sí mismos. Algunos libros también son también para llevar al lector a darse cuenta de que todos los nombres son también compuestos. Por ejemplo: As patas da vaca, Formiga amiga, O pato pacato, Bichos são todos bichos y Somos todos igualzinhos. Todo nacen de pequeñas observaciones mías alrededor de la palabra y de la fantasía. De hecho, mi experiencia de un niño del interior, perdido entre los ríos, los bosques, el silencio me ayuda a que sea así.


* Bartolomeu Campos de Queirós, recibió el Sello de Oro de la FNLIJ , el Premio Bienal de San Pablo, el Premio Prefeitura de Belo Horizonte, Jabuti y muchos otros. 

martes, 12 de junio de 2012

Más allá del gran río. Editorial Juventud


Texto: Armin Beuscher
Ilustración: Cornelia Haas

Existen libros en la LIJ que tratan sobre la muerte, son pequeñas obras maestras que tocan el tema con valor y madurez, cuentos como “No es fácil pequeña ardilla” de Elisa Ramón y Rosa Osuna, “El pato y la muerte” de Wolf Erlbruch o “Como si el ruido pudiera a molestar” de Gustavo Roldán. “Más allá del gran río” se ubica dentro de esta clasificación. La ternura y fortaleza del texto, el tono alegórico que no oculta la realidad pero nos prepara para ella, la belleza de las ilustraciones, tanto de los personajes como de los fondos, todo se conjuga para hacer un libro álbum inolvidable.

Vale la pena realizar un análisis detallado del libro, para ver cómo se conjugan texto e ilustración,  formando capas de sentido de gran belleza y sentimiento.
La tapa nos muestra el abrazo eterno entre la Liebre y el Mapache, apenas separados por un tronco de raíz que se hunde hacia el suelo. En la guarda inicial la Liebre mira un libro y se va pensativa (¿irá a buscar al Mapache?). En la primera doble página la Liebre y el Mapache se miran, el fondo son tonos pasteles en amarillo y verde, sin detalles, algunas hojas los rodean en una suerte de abrazo. La Liebre le dice al Mapache.
 –Tengo que hacer un viaje y no puedo llevarte. Al Pato, al Elefante y al Ratón tampoco.
-¡Oh, no! –dijo el Mapache -.No puedes irte sola. Debemos ir contigo porque tienes que cruzar el gran río y el río es ancho y profundo.

En la segunda página son las flores las que rodean a la Liebre y al Mapache. La Liebre, decidida, nos da la espalda: “este viaje tengo que hacerlo sola. Tu puedes acompañarme hasta la orilla”. El Mapache se gira para mirarnos, “El Mapache se sentía muy raro”, nos dice el texto.


En la tercera está la imagen de la tapa y contratapa, el abrazo de despedida. El tronco de la raíz actúa como frontera, las medias que tapaban las orejas de la Liebre cuelgan de él, son un símbolo del recuerdo de la vida. “estaría bien que les hablaras de mí al Pato, al Elefante y al Ratón” pide la Liebre “… y una lágrima de Liebre se deslizó por su cara”
La siguiente página nos muestra el río, ancho, con dos amarres, se ven hojas flotando, arriba, gotas de agua, como lágrimas. Sin texto, la ilustración delicada pero hermosa, simboliza la muerte.

En la página siguiente el Mapache está solo sentado en una piedra, los tonos verdes y amarillos  dejan paso a los azules, que rodean la sombra del Mapache. “Entró en el agua pero no se hundió. Era como si estuviera sentada en una barca que la llevaba. Pero yo no vi ninguna barca y después la Liebre desapareció” contaría después el Mapache. “Tenía el corazón roto. Se sentó en una piedra y lloró…”


La siguiente página es impresionante, el Mapache sentado mirando hacia la izquierda, recordando, los tonos azules, y la Liebre pintada en lápiz blanco sentada contra su espalda mirándolo. Y es el recuerdo de la Liebre el que da fuerzas al Mapache. “…recordó cómo se animaban mutuamente”


En la siguiente página vuelven los tonos amarillos y verdes, el Mapache está con el Ratón, el Pato y el Elefante. “La Liebre no volverá” les dice, “¿ha muerto” pregunta el Elefante. “-Sí –contestó el Mapache.” Las medias de la Liebre, en una botella, acompañan al Mapache.
Los cuatro van a dar una vuelta en silencio, arriba de cada uno, en lápiz blanco sobre azul, se ven los recuerdos que cada uno tiene de la Liebre.

En la siguiente página, el Elefante tomó su trompeta y comenzó a tocar una canción.
“Tocaron hasta muy tarde y el Mapache incluso bailó”, en esta página los azules rodean el núcleo amarillo y verde de los personajes, representando la reconciliación con la separación.
La anteúltima página muestra a los personajes acostados. Mapache abraza la botella con las medias de la Liebre. “¿Tú crees que la Liebre nos ha oído tocar?” preguntó el Ratón. “Claro que sí” dijo el Mapache. “-Pues entonces tocaremos más a menudo”.

En la última página vemos el gran río amarillo como en un amanecer; en el amarre, la botella, como una despedida y un nuevo comienzo.

El libro no se detiene en la alegoría, el gran río es un símbolo, pero la Liebre ha muerto. Los personajes se enfrentan a ella con entereza, sufren, aman y de ese amor y esos recuerdos sacan fuerzas para seguir, para cantar y ser felices.

Aceptar la muerte como una etapa más de la vida, sin temerla, es quizás el regalo más importante que podemos legarle a un niño, este libro, como los otros mencionados, nos ayuda en este objetivo.




ISBN: 978-84-261-3374-8
Colección Álbumes Ilustrados
32 páginas
Encuadernado en cartoné
Formato: 21,3 x 31 cm

jueves, 7 de junio de 2012

Pequeña Historia de Editorial Juventud

Editorial Juventud fue fundada en 1923 por D. José Zendrera Fecha y desde sus inicios se especializó, entre otros temas, en literatura infantil y juvenil.
El primer libro infantil de Editorial Juventud apareció en 1925: era Peter Pan y Wendy de J. M. Barrie. Siguieron obras de tanto alcance como Heidi de J. Spyri, Bibí de Michaelis, Emilio y los detectives de E. Kästner, Alicia en el País de las Maravillas de L. Caroll o Mary Poppins de Travers u Oscar de Carmen Kurtz. Tuvo el acierto de dar especial relieve a las ilustraciones y eligió así a los más célebres ilustradores tales como Rackham, Atwell, Junceda, Llaverias, Lola Anglada.
Saltó a la fama, entre otros éxitos, con las traducciones de Las aventuras de Tintin de Hergé y de Enid Blyton.
Editorial Juventud también fue una de las editoriales pioneras del álbum ilustrado para niños y se ha consolidado hoy en día como una de las editoriales con más prestigio en este sector, dando presencia a los autores e ilustradores más significantes de todo el mundo como Helen Cooper, Gianni Rodari, Arthur Rackham, David Wiesner, Roberto Gonsalves, Ángel Dominguez, Jerôme Ruillier, Albert Asensio, Peter Schössow… Algunos de sus libros infantiles como Cuentos por teléfono de Gianni Rodari o los álbumes Stelaluna, Sopa de Calabaza, El oso que amaba los libros, o El cazo de Lorenzo se han convertido en pequeños best-sellers del mundo infantil.
Hoy en día, Editorial Juventud está presente en más de 40 países del mundo, en el mercado de librerías y en todas aquellas licitaciones destinadas a proveer de acervos bibliotecas públicas y escolares en todos los países donde está presente.









viernes, 1 de junio de 2012

Una pequeña presentación de Editora Global

En 2012, Global Editora cumple 39 años. Aunque comenzó editando libros de sociología y marxismo, hoy es una de las más importantes editoriales de Brasil en el área de la Literatura Infantil y Juvenil. Entre sus autores se encuentran Ruth Rocha, Ana María Machado, Eva Furnari, Marina Colasanti, Edy Lima, Sidônio Muralha, João Carlos Marinho, Roger Mello, André Neves y Bartolomeu Campos de Queiros.

Global Editora participa de muchos proyectos sociales de promoción de la lectura, a través de distintas fundaciones.
Con parte de su catalogo traducido al español, Global Editora es la segunda mayor exportadora de autores brasileños publicados en lengua española, llegando a toda América Latina, el Caribe y los Estados Unidos.
Una pequeña selección de tapas, para que vayan conociendo el catálogo.